¿Cómo contar la verdad a través de la magia?
Calabobos, de Luis Mario.
La novela se enmarca en un realismo mágico polifónico que tiene en común con alguno de los libros que quizá quedarán como los más importantes de los últimos años, el genial Canto yo y la montaña baila (Irene Solá, Anagrama, 2019) o La península de las casas vacías (David Uclés, Siruela, 2024).
Otra de las decisiones literarias del autor fue la de hacer uso de una oralidad, que es otro síntoma de estar ante una historia de realismo extremo, aunque sui generis.
La lluvia constante, el mar omnipresente y amenazador, las generaciones de temores y odios que astillan la convivencia en los pueblos… Es un retrato de una Cantabria fuera del alcance de foráneos, y que solo puede ser atestiguada a este nivel a través de la literatura. Y es una historia dura, de rechazos, de angustias, de vidas truncadas por los rumores, de desesperanza y de pena, pero es un libro originalísimo y ha sido una muy grata sorpresa, lo recomiendo encarecidamente.
Calabobos está escrito por Luis Mario, editado por Reservoir Books, y tiene 176 páginas.
Imagen: Jacques-Raymond Brascassat - Un combat de taureau - 1855 -Museo de Bellas Artes de Houston
En Antropología, la cultura de un grupo humano puede ser narrada en dos planos paralelos, equivalentes, pero con muy diferentes recursos narrativos. El primer plano es el de la realidad, y es descrito por la economía o la historia. El segundo es el de la magia, el de lo simbólico. Este explica, aliña, esclarece y oculta, según se tercie, elementos del plano de lo real. Uno no puede entenderse sin el otro, y es muy difícil aislarlos por completo en una dicotomía de lo estrictamente real y lo estrictamente mágico.
Luis Mario ha buscado, según ha explicado en alguna ocasión, representar una imagen de Cantabria lo más real y cruda posible en su última novela, Calabobos. Es un nivel de realidad al que llega solamente al ubicar el libro únicamente en el plano de lo mágico. Desde ahí el lector, página a página, va revelando la realidad de los hechos, lo que realmente sucede en la trama, como si se tratara de un etnógrafo perdido entre sus apuntes de campo de las distintas versiones dadas por cada familia del ritual religioso de los Tsembaga de Papúa Nueva Guinea, o los Nuer del Sudán.
